domingo, 31 de enero de 2010

EL CICLO MENSTRUAL


El ciclo menstrual es lo más básico y terrenal que tenemos las mujeres. La sangre es nuestra conexión con o femenino arquetípico. Los ciclos macrocósmicos de la naturaleza, como el flujo y reflujo de las mareas y los cambios de estación se reflejan a menor escala en el ciclo menstrual del cuerpo femenino individual. En muchas culturas el ciclo menstrual se ha considerado sagrado hasta hace 5000 años cuando las pacíficas culturas matriarcales de la vieja Europa fueron derrocadas. El significado original de la palabra “tabú” era “sagrado” y a las mujeres que estaban menstruando se las consideraba sagradas; ahora en algunas sociedades se las consideras sucias. Sus sueños y visiones solían aprovecharse para guiar a la tribu.
Si queremos recuperar nuestra sabiduría menstrual y honrar nuestra naturaleza cíclica, al mismo tiempo hemos de reconocer nuestras actitudes negativas hacia el ciclo menstrual que la mayoría de nosotras hemos interiorizado. Nuestra naturaleza cíclica ha sido el blanco de muchos chistes y burlas. A parte de la violencia y el miedo, nada en nuestra sociedad ha sido más eficaz para mantener en su lugar a las mujeres que la degradación del ciclo menstrual.
Parte de nuestra sanación consiste en reemplazar por información correcta los nocivos mitos heredados sobre nuestro ciclo menstrual.

Sanar a través de nuestros ciclos:
Durante todo el ciclo menstrual hay una estrecha relación entre la psique de la mujer y el funcionamiento de sus ovarios.
Antes de la ovulación estamos extravertidas y animadas, durante la ovulación estamos muy receptivas hacia l@s demás y después de la ovulación (antes de la menstruación) estamos más introvertidas y reflexivas.
Una vez que empezamos a valorar nuestro ciclo menstrual como parte de nuestro sistema de guía interior, comenzamos a sanar tanto en el aspecto hormonal como en el emocional. No cabe duda de que antes de la menstruación muchas mujeres se sienten más introvertidas y más conectadas con su dolor personal y el dolor del mundo. Muchas también están más conectadas con su creatividad y tienen mejores ideas antes de la menstruación, si bien es posible que no las lleven a la práctica hasta más adelante.

Te propongo que tomes tiempo para ti durante unos meses para conocer o reconectar con tu ciclo personal y menstrual. Lo que necesitas principalmente para hacerlo es:
 Ternura, una buena cantidad
 Un cierto orden en lo cotidiano
 Un método a tu medida

No lo dudes, si tus ciclos no son regulares, te duele la regla o necesitas algo fuera de ti para controlar tu fertilidad, hay algo en ti que necesita ser descubierto.

FÍJATE:

 No tiras siempre el mismo flujo (consistencia, color, olor…)
 Los pechos no están siempre igual, en ocasiones turgentes, a veces fláccidos y algunas veces súper sensibles.
 Los genitales externos (la vulva), los labios mayores y menores no están siempre igual. Si los miramos, si los sentimos, observaremos estos cambios enrojecidos, blanquinosos, retraídos o exuberantes que nos informan, día a día, momento a momento, del estado fértil o infértil de nuestro ciclo.
 Los genitales internos, un poco más apartados, un poco más desconocidos son una oportunidad para conocer nuestra identidad de mujer. Las paredes de la vagina cambian de textura y color. La matriz sube y baja dentro de ella, según se menstrúe o se ovule, así como el cerviz: la puerta de la matriz que se abre para que salga el sangrado cíclico o la cíclica ovulación.
 Observa las sensaciones al interior de tu vientre.
 Toma tu temperatura cada día por la mañana antes de levantarte y observa si varía en unas décimas durante algunos días al mes.
 Ten también en cuenta los cambios en tu estado de ánimo durante tu ciclo.
 Conecta con tu deseo sexual personal: ¿tienes siempre las mismas ganas? ¿el placer es siempre el mismo? ¿percibes siempre el mismo amor?

Observa, anota, explora y recopila todos los datos que puedas acerca de estos cambios en un cuaderno.

LA VOLUNTAD ES LA CLAVE, LA CONSCIENCIA ES EL CAMINO

jueves, 21 de enero de 2010

YOGA SADHANA: MÉTODO Y CONDICIONES PARA LA PRÁCTICA

(Foto arriba: Guruji BKS Iyengar enseñando a Yehudi Menuhin)

ACTITUD MENTAL:1.
La sadhaka ha de tener en cuenta que yama y niyama son etapas previas a asana y pranayama. Sin preceptos éticos la práctica del yoga se convierte en un mero ejercicio físico.
2. Las madres de familia no han de temer que el yoga sea imposible de practicar debido a la disciplina que requiere. Los yamas y niyamas nos ayudan a cultivar buenas costumbres y a reformar hábitos para evitar tristezas derivadas de actos negativos.
3. El saber tiene un comienzo, pero nunca un fin; no debemos desanimarnos si progresamos con lentitud.
4. El yoga se ha de practicar con seriedad, fe, entusiasmo, determinación, rigor, valentía y fuerza de voluntad. No es un mero hobby.
5. Patanjali (en los YS 1.22-23) nombra tres tipos de practicantes según sus capacidades físicas, mentales y su naturaleza:
a. débil
b. medio
c. fuerte
Estas tres categorías se subdividen a su vez en tres.
Para conseguir evolución espiritual se necesita un mental puro y motivación. Hemos de practicar yoga de manera gradual observando nuestros propios progresos para que nos pueda purificar.




6. A menudo las principiantes empiezan a practicar con mucha vehemencia y son incapaces de sentir aspectos sutiles a nivel físico o mental. Hay que perseverar con determinación para entender la belleza y sutileza del yoga.
Buddhi – Inteligencia
7- Al efectuar asanas y pranayama es la inteligencia la que juega el papel más importante. Los movimientos se han de hacer para obtener el máximo efecto fisiológico y psicológico, por tanto, no es una mera contorsión.
8- Suele pasar que un/a sadhaka entiende cómo hacer una asana pero no puede hacerla. Un simple conocimiento intelectual de las asanas es ilusorio. Cuando el conocimiento teórico y el práctico se unen se da armonía, claridad y sabiduría. Esto se llama prajna.
Ahamkara – Ego
9- Después de haber adquirido competencias en la práctica del yoga no hemos de abandonarlo con la excusa de que es una búsqueda exterior. Ni vanagloriarnos de que hemos conseguido dominarlo, ni pensar que hemos domado nuestros sentidos, o que ya no necesitamos disciplina. Esto sería un crecimiento del ego, y aquí terminaría cualquier esperanza referente al yoga.
10- El ego que se manifiesta exageradamente penetra la personalidad bajo una forma sutil y la invade por completo. Es el peor enemigo de la práctica del yoga. La sadhaka ha de cultivar la humildad. Todo resultado ha de considerarse un don de la gracia divina y hamos de entregar nuestra práctica a Dios. Esto es humildad.
11- El Sí-mismo aunque carece de forma, posee una apariencia bajo la forma del cuerpo. La sadhaka ha de recordar que tiene que partir del cuerpo que es la envoltura externa del Sí-mismo. Esto conduce a la búsqueda interior.
Cerebro:
12- El cerebro ha de estar calmado, alerta y atento para examinar los movimientos del cuerpo y de la mente durante la práctica.


MANAS – MENTE:

13- La ejecución de las asanas depende de la flexibilidad del cuerpo.
Esto hace pensar que hemos llegado a nuestros límites personales. Es
entonces que hay que demostrar flexibilidad de espíritu para
sobrepasar de verdad nuestros límites mentales.
14- existe una lucha entre el cuerpo y la mente cuando efectuamos
una asana. Hay que activar mediante la concentración el que esté
sin tono. La pereza y el aletargamiento son los enemigos del yoga.

SARIRA – CUERPO:
1- Si constata nerviosismo físico o psíquico, hay lagunas en su práctica.
2- Las principiantes sentirán dolores en el cuerpo después de practicar. Practicando con regularidad disminuirán estos dolores. Si persistieran, pare y pida consejo a un/a profesor/a con experiencia.
3- Trate de encontrar lo que provoca el dolor en las posturas repitiendo los movimientos de cada lado y observando las reacciones.
4- Durante la práctica aparecen dolores menores que desaparecen si continuamos practicando.
5- Hemos de saber diferenciar un dolor normal de un dolor anormal. El dolor normal o natural aparece cuando aumentamos el ámbito de acción. No nos molestan en nuestra vida cotidiana. En cambio los dolores anormales persisten. Molestan tanto en la práctica como en la vida cotidiana. Hay que pedir consejo a un/a profesor/a experimentado en caso de sentirlos.
6- La mayoría de l@s practicantes notan que la parte derecha e izquierda de su cuerpo es distinta, siendo una más flexible que la otra. La parte más inteligente ha de servir de guía a la menos inteligente.
7- Según su naturaleza, unos cuerpos son flexibles y otros rígidos.
8- A veces el/la practicante siente que su práctica es incorrecta a causa de una falta de vigor. Hay que emplear entonces la mente y la inteligencia para observar los desafíos y las reacciones de su mente y de su cuerpo que estimulará tanto su práctica como su Ser.
9- Evite movimientos agresivos o que tensen la musculatura para llegar a la postura final. Se debe observar con atención si la postura final es correcta, re-estirar y terminar de ajustarla.
10- Las principiantes han de esforzarse en captar las sutilezas de los ajustes en las posturas. Esto les permitirá hacer el asana con soltura y equilibrio.
11- Al practicar asanas y pranayama es necesaria una visión interior para auto-analizarse.
12- Observad la calidad de las asanas y no la cantidad calidad significa hacer las postura correctamente, con firmeza y sinceridad.
13- Manténgase alerta y atent@ a todos los miembros de su cuerpo ya que el cuerpo ha de reaccionar enteramente ante una asana.
14- Las asanas se han de efectuar con los sentidos disciplinados y al interior.
15- Una práctica sin defectos conduce a cambios drásticos en la personalidad. Nos volvemos moderad@s en nuestros hábitos, en nuestra alimentación, en el sueño, y en la vida sexual.
16- Hay tres etapas en la práctica de una asana para que la práctica reporte frutos:
a. escuchar
b. reflexionar
c. poner en práctica y experimentar

LA PRÁCTICA VERDADERA SOLO SE PUEDE REALIZAR DE ESTE MODO.
(Geeta Iyengar).

martes, 12 de enero de 2010

YOGA Y PROBLEMAS MENSTRUALES



La adolescencia es el periodo de desarrollo durante el que se da la transición de la infancia a la madurez. En él se producen importantes cambios físicos y psicológicos.
Los ovarios, principales órganos reproductores de la mujer están situados a cada lado del útero y empiezan a funcionar produciendo óvulos, o células de reproducción femeninas.
Cuando el óvulo no es fecundado, no necesita sangre para nutrirse, la membrana inflada y el exceso de sangre son desechados del útero por la vagina en forma de sangrado. Este sangrado se produce una vez al mes y es la menstruación.
La menstruación es pues un fenómeno puramente fisiológico que prepara el cuerpo femenino para la reproducción, una función biológica.
Menstruar sin problemas depende del buen funcionamiento de los ovarios, que a su vez depende del buen funcionamiento de la hipófisis. Un ritmo o un ciclo regular en los ovarios también depende del hipotálamo que está estrechamente relacionado con la hipófisis.
Las asanas de yoga y el pranayama son de gran ayuda durante la pubertad cuando el cuerpo de la niña se transforma en el de una mujer. Las posturas invertidas y las extensiones hacia atrás estimulan útilmente la hipófisis. Las extensiones hacia delante son igualmente eficaces ya que aportan sangre nueva a la zona pélvica y a los órganos reproductores y sexuales. Las asanas de pie son un tesoro para un buen desarrollo del sistema esquelético y para mejorar la forma del cuerpo.
Practicar yoga a esta edad infunde valor para convertirse en una mujer sin problemas psicológicos. Ayuda a apaciguar y a frenar los impulsos y las emociones ; esto equilibra la mente. La joven domina miedo y nerviosismo y aprende a afrontar con confianza los cambios que afectan su vida y su entorno.

Problemas menstruales:
La práctica del yoga y de pranayama puede aliviar y corregir defectos o un mal funcionamiento de los órganos. Produce un buen equilibrio en las glándulas endocrinas, que son estimuladas para funcionar de manera eficaz.. Fortifica los músculos del útero. Las asanas ayudan a relajarse y a descansar. Aseguran un flujo menstrual normal.
Además, se reducen las tensiones y las presiones psicológicas a través de la práctica de asanas y de pranayama, cambiando de una actitud mental negativa a una actitud positiva.
Síntomas como la tendencia a la fatiga, el insomnio, cambios de humor, sensibilidad o ligera hinchazón de los pechos, son debidos a la actividad hormonal pre-menstrual y se pueden considerar “normales”.
Los ciclos menstruales han de producirse dentro de intervalos regulares.
Los principales problemas referentes a la menstruación que se pueden dar, son:
1- AMENORREA: ausencia de menstruación. Si este problema se da durante más de de seis meses, se ha de enfatizar en la práctica de invertidas con variantes y extensiones hacia atrás ya que estimulan la pituitaria y los ovarios.
2- DISMENORREA: menstruación difícil y dolorosa. A menudo se sienten calambres durante la menstruación. En este caso, para evitar este problema, se ha de ajustar la práctica 4 días antes de que comience. Es conveniente enfatizar en la práctica de sirsasana y sarvangasana antes de la menstruación. Y cuando se haya acabado, volver a practicar estas dos posturas con algunas variantes para re-establecer el equilibrio hormonal.


Durante la regla, se han de evitar las posturas invertidas. Utthita hasta padangustasana, , supta padangustasana, baddha konasana, y upavishta konasana ayudan a liviar los dolores menstruales. Para tonificar los músculos del abdomen se pueden hacer parivrtta trikonasana, parivrtta parsvakonasana y virabhadrasana 1 en los días después de la regla. En cambio, si se practica parivrtta trikonasana, parivrtta parsvakonasana y virabhadrasana 1 durante los días pre-menstruales, se tensará el abdomen y luego habrá dolor durante la regla. Si se hacen estas posturas los días después de la regla, el vientre está más relajado y se puede trabajar mejor la rotación adecuada del abdomen para incorporarla y aplicarla en otros momentos del ciclo en los que el vientre está más duro.
3- MENORRAGIA: menstruaciones anormalmente prolongadas. Las que suelen sangrar abundantemente, han de enfatizar en la práctica de posturas de pie antes de la regla: Utthita trikonasana, utthita parsvakonasana y ardha chandrasana, utilizando un ladrillo para apoyarse y hacer girar bien el abdomen hacia arriba. En virabhadrasana 2 se ha de girar también el abdomen. Se puede utilizar la pared para hacer la postura (espalda contra la pared). Cuanto más se abre el pecho y la región pélvica, más libertad se obtiene.
4- METRORRAGIA: hemorragias uterina diferente a la menstruación. (sangrados entre reglas).
 Referente a la menorragia y metrorragia, se ha de enfatizar en las posturas supinas durante la menstruación más que en las extensiones hacia delante ya que las primeras ayudarán a equilibrar el flujo menstrual. Añadid viparita dandasana y setu bandha sarvangasana con soportes. La práctica regular de invertidas fuera de los días de regla ayuda a controlar esta situación.
 Para situaciones de sangrados fuertes o a destiempo, se ha de comprobar durante la práctica que el útero retrocede hacia el interior. Para ello, durante la práctica de sirsasana y sarvangasana, las piernas se han de separar del modo en que se hace en upavishta konasana o en baddha konasana.. incluso en halasana o en setu bandha sarvangasana las piernas se han de separar. Muchísimo énfasis en supta konasana, baddha konasana, upavishta konasana, supta padangustasana 2, utthita hasta padangustasana 2, y en prasarita padottanasana es esencial. Después de efectuar esta separación de piernas, se ha de volver a colocar los pies juntos con las acciones correspondientes: utthistha, Pascimottanasana, viparita dandasana, sirsasana, sarvangasana, halasana, y setu bandha sarvangasana con el bloque o mantas enrolladas entre las piernas. Después de haber separado las piernas, cuando éstas se vuelven a juntar atadas, el útero y la vagina retroceden dentro del tronco. Si esta manera de practicar se cambia, primero pies y piernas juntas y luego separadas, se estimulan los ovarios y se potencia que el flujo menstrual salga, lo cual es necesario en caso de amenorrea.

 Cuando se sangra durante más de 12-15 días, sí se pueden hacer invertidas después del 12º día, a modo terapéutico para parar el sangrado y continuar la práctica de invertidas a partir del 12º día durante los 3-6 meses siguientes.
5- HIPOMENORREA: pérdidas insuficientes. La menstruación se da durante 1 día, o 3ó 4, pero en muy poca cantidad. Esto crea una sensación de insatisfacción. Las extensiones hacia delante ayudan en este caso. Por ejemplo, malasana y kurmasana. Durante todo el resto del mes, se ha de practicar posturas de pie, extensiones hacia atrás, torsiones e invertidas ya que la menstruación es el resultado de la práctica codiiana.
6- LEUCORREA: pérdidas excesivas de flujo. Suele provocar cansancio e irritabilidad. Se recomiendan las posturas supinas, especialmente supta baddha konasana y supta padangustasana 2. hay que evitar que se tense el abdomen en las posturas de pie. El abdomen se ha de llevar hacia la columna vertebral y se ha de corregir también la posición del útero. Las invertidas son de gran ayuda también.
7- TENSIÓN PRE-MENSTRUAL: la causa principal suele ser una tensión de origen nervioso que puede provocar migrañas, tensión nerviosa, pechos hinchados, temblores, irritabilidad, pesadez en la región pélvica, o inflamación. Si se sufre de migrañas antes o durante la menstruación se ha de evitar virabhadrasana 3 los día antes de la regla. Esta asana se puede hacer otros días del ciclo. De hecho, si se hace con un soporte para el abdomen, ayuda a relajarlo, al contrario de si se hace sin soporte, que provoca contracción.

 Cabe reseñar que los primeros 15 días después de la menstruación el cuerpo funciona muy bien. Coopera. Pero los siguientes 15 días deja de cooperar tanto, así qu tú eres la que tiene que cooperar con él. Si te sientes cansada, enfadada, pesada y floja has de enfatizar en los ajustes en las posturas durante tu práctica pues la práctica de la primera quincena ayuda a la de la segunda quincena, y ésta ayuda a la menstruación.. una práctica adecuada durante la regla ayuda durante el mes siguiente. Así que la cuestión no es hacer más o menos sino hacer lo correcto, entender la práctica y ajustarla para hacer frente a los cambios. Una práctica equilibrada es la clave para una buena salud.

Apuntes de Geeta Iyengar: "Yoga, a gem for women" y "The practice for the hole month".